Los ataques de denegación de servicio (DDoS) han hecho estragos en el tejido empresarial español a lo largo de 2017. A nivel de las grandes firmas, estas amenazas provocaron el pasado año daños económicos valorados en 2 millones de euros a nivel global.

El coste financiero total de los ataques DDoS contra empresas españolas superó el pasado año los 100.000 euros, una cifra superior a los 85.000 registrados en 2016, como ha determinado el estudio «IT Security Risks Survey 2017» de Kaspersky Lab. En el caso de las grandes empresas, los efectos se han traducido en el crecimiento de los 1,3 millones de euros de 2016 a los 2 millones de 2017.

En un comunicado, Kaspersky ha destacado el crecimiento drástico de los costes financieros de los ataques DDoS durante el pasado año. Asimismo, ha recalcado que además de las cuantías económicas, las empresas víctimas de estos ciberataques han sufrido otros impactos «difícilmente cuantificables» como los daños a la reputación, que pueden llegar a paralizar a muchas organizaciones.

Según la encuesta de Kaspersky Lab, un 35% de las entidades españolas reconoció que la principal consecuencia económica negativa de los ataques DDoS, ya fuesen estos aislados o integrados dentro de otros más amplios, fueron los costes incurridos en la lucha contra el ataque y la restauración de los servicios. Por su parte, un 25% apuntó a la inversión realizada en los sistemas «offline» o de «backup».

Otro 23% de empresas de España reconoció que la pérdida de ingresos y de oportunidades de negocio fue resultado directo de los ataques, mientras que un 22% mencionó la pérdida de reputación entre clientes y colaboradores como una consecuencia indirecta del ataque.

El estudio de la firma rusa ha concluido que solo el 19% de las organizaciones encuestadas utiliza soluciones especializadas contra ataques DDoS como medida preventiva. Entre quienes lo admitieron, un 20% reconoció que el coste de contar con la solución supera al riesgo. Sin embargo, el precio de una solución anti-DDoS para un mediana empresa puede ser de 12.000 euros anuales, y de 40.000 para una gran firma, lo que representa «una pequeña proporción» de lo que puede representar el coste en caso de producirse un ataque.

Kaspersky ha indicado que las empresas «deben invertir en medidas de protección» contra ataques DDoS aislados o integrados en otros. El directivo ha destacado que es importante elegir soluciones de seguridad “especializadas y fiables, basadas en la experiencia“.

Fuente: Segu-info.com.ar

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