La empresa habría ocultado dicho hackeo durante más de un año, según informes de Bloomberg. Los datos comprometidos en dicho ataque que sucedió en octubre de 2016 incluyen nombres, direcciones de correo electrónico y números de teléfono de 50 millones de usuarios en todo el mundo.
También se accedió a la información personal de aproximadamente 7 millones de choferes.
En un comunicado, reconoció que fue un error no avisar a los usuarios y choferes al respecto del hackeo, cuando tuvieron conocimiento en noviembre de 2016.
“Cuándo tuvimos conocimiento del incidente en noviembre de 2016, dimos pasos para contener y prevenir una crisis, pero no le hicimos saber esto a los conductores. Creemos que eso estuvo mal, razón por la cual estamos ahora tomando las acciones que describimos”, indica el documento.
El CEO de la empresa, Dara Khosrowshahi indicó mediante una nota informativa que no fueron descargados historial de ubicaciones de viajes, números de tarjetas de crédito, números de cuentas bancarias, números de Seguro Social o fechas de nacimiento.
En lugar de informar a los usuarios y choferes afectados sobre el hackeo, Uber habría pagado cerca de 100 mil dólares a los hackers para que borraran los datos obtenidos y mantener el problema oculto, según Bloomberg.
Uber informó que consideran que la información nunca fue utilizada, pero se negó a revelar las identidades de los atacantes.
“Nada de esto debió suceder y no pondré escusas al respecto”, dijo Dara Khosrowshahi, quien tomó el mando como director ejecutivo en septiembre de este año.
«Si bien no puedo borrar el pasado, sí puedo comprometerme a nombre de cada empleado de Uber a que aprenderemos de estos errores. Estamos cambiando la forma en que trabajamos, poniendo la integridad en el centro de cada decisión y esforzándonos para ganar la confianza de nuestros clientes», señaló.
El Financiero contactó a Uber México que indicó que el siguiente paso en el país será notificar a las autoridades regulatorias al respecto del ciberataque, sin especificar la magnitud de las afectaciones en las operaciones locales.