Apple acaba de sufrir una de las mayores filtraciones de su historia.

Un usuario anónimo ha publicado en el repositorio de GitHub el código fuente de iBoot, una parte crítica en el código fuente del iPhone que equivale a la BIOS en los PC como responsable del arranque del sistema operativo.

El código filtrado corresponde a iOS 9, una versión del sistema operativo que utilizan actualmente menos del 7%de los dispositivos de Apple, pero que probablemente tenga muchas características y líneas en común con la versión actual.

«Es la mayor filtración de la historia», ha resumido a Motherboard Jonathan Levin, experto en programación y autor de varios libros sobre los entresijos de iOS y OSX.

Apple normalmente ha sido muy reacia a publicar el código de sus sistemas, aunque en los últimos años sí ha liberado ciertas partes de iOS y Mac OS. Sin embargo, iBoot es una de las partes más delicadas del código fuente de los iPhone, como demuestra el interés de Apple durante todos estos años por mantenerlo cerrado.

La compañía, de hecho, tiene activo un programa de recompensas por encontrar fallos en su sistema operativo que paga la máxima cantidad (hasta 200.000 dólares) por localizar fallos en esa parte crítica de iOS.

La filtración del código que sirve para iniciar el sistema operativo puede implicar graves riesgos a medio plazo, según ha explicado Levin.

Por un lado, los cibercriminales podrían aprovecharlo crear software malicioso que se ejecute directamente desde el arranque del sistema, comprometiendo la seguridad del dispositivo.

Además, la liberación del código podría facilitar a los piratas informáticos hacer jailbreak al dispositivo para poder instalar, modificar y cambiar cualquier elemento del sistema. En última instancia, la filtración podría ayudar a los programadores a emular iOS en otras plataformas que no sean de Apple.

«La seguridad de nuestros productos no depende de que se mantenga en secreto nuestro código fuente. Hay muchas capas de protecciones de hardware y de software integradas en nuestros productos y, además, instamos siempre a nuestros clientes a que se actualicen a las últimas versiones de software para beneficiarse de las protecciones más avanzadas”, ha explicado en un comunicado Apple.

Los datos de la compañía apuntan a que más del 65% de los dispositivos activos funcionan en la actualidad con la última versión del sistema operativo, que fue lanzado el pasado 19 de septiembre de 2017.

Compartir