Un fallo de diseño en el mecanismo de registro del servidor VPN de Fortinet puede aprovecharse para ocultar la verificación exitosa de credenciales durante un ataque de fuerza bruta sin alertar a los defensores de los inicios de sesión comprometidos.
Aunque el ataque de fuerza bruta todavía es visible, una nueva técnica permite registrar solo los intentos fallidos y no los exitosos, lo que genera una falsa sensación de seguridad.
Verificación de credenciales de VPN
El servidor VPN de FortiClient almacena la actividad de inicio de sesión mediante un proceso de dos pasos que consta de una etapa de autenticación y otra de autorización.
Los investigadores de Pentera, descubrieron que un inicio de sesión exitoso solo se registra si el proceso pasa tanto la etapa de autenticación como la de autorización; de lo contrario, FortiClient VPN registrará una autenticación fallida.
En un informe publicado hoy, la empresa de ciberseguridad describe cómo sus investigadores idearon un método para detener el proceso de inicio de sesión completo después de la etapa de autenticación, lo que les permite validar las credenciales de VPN sin registrar el éxito.
Los investigadores utilizaron la herramienta de prueba de seguridad de aplicaciones Burp para registrar las interacciones entre el cliente y el servidor VPN.
Observaron que la respuesta a la solicitud HTTPS inicial muestra credenciales válidas (a través de un valor «ret=1»), una autenticación fallida («ret=0») o la respuesta «Se produjo un error» en caso de múltiples intentos fallidos consecutivos. En términos más simples, la autenticación solo confirma que las credenciales son válidas y la autorización establece una sesión VPN.
Sin embargo, si el proceso se detiene después de la etapa de autenticación, el servidor VPN solo registra los intentos fallidos, y no los exitosos, ya que no continuó con el siguiente paso de autorización.
«La incapacidad de registrar intentos de autenticación exitosos en la fase de autenticación presenta un riesgo de seguridad significativo. Los atacantes podrían explotar potencialmente esta vulnerabilidad para realizar ataques de fuerza bruta sin detectar sus intentos exitosos» – Pentera
El problema generado de esta manera es que un equipo de respuesta a incidentes no puede determinar si un intento de fuerza bruta en un ataque de este tipo fue exitoso y solo verá registros de procesos fallidos.
Los intentos de autenticación fallidos aún alertarán a un administrador de Fortinet de que su dispositivo está bajo un ataque de fuerza bruta y le permitirán bloquear potencialmente los intentos. Sin embargo, no sabrán que el atacante pudo verificar las credenciales con éxito. Estas credenciales luego se pueden vender a otros actores de amenazas o usar en un momento posterior para violar la red, cuando los administradores ya no estén alertas a la actividad maliciosa.
Vale la pena señalar que incluso si un actor de amenazas determina un conjunto de inicio de sesión correcto y lo usa en un ataque, el proceso de autorización solo se completa después de que FortiClient VPN envíe dos llamadas API que verifican el cumplimiento de la seguridad del dispositivo y el nivel de acceso del usuario.
Esta verificación complica significativamente el ataque, pero un atacante con buenos recursos aún podría usar el método de Pentera para violar la red de una organización. Pentera dice que compartió la investigación con Fortinet y la compañía respondió diciendo que no consideraba que el problema fuera una vulnerabilidad. No está claro si Fortinet abordará el problema, especialmente porque no es una solución complicada.
Fuente y redacción: segu-info.com.ar