La 61 edición del TOP500 ha renovado la lista de las supercomputadoras más rápidas del planeta, las cuales funcionan todas con Linux desde hace un tiempo. En esta ocasión nos encontramos con una clasificación en la que muchas máquinas han mantenido sus posiciones en comparación con las obtenidas el año pasado, así que volvemos a encontrarnos con Frontier ocupando el primer lugar seguida de Fugaku, Lumi y Leonardo.
Como vemos, no ha habido movimientos al menos en lo que respecta a la posición dentro del TOP500. Esto quiere decir que Europa todavía retiene los logros alcanzados el año pasado, lo que es una buena señal viendo que el viejo continente, durante el transcurso de los últimos tiempos, parecía perder fuelle frente a China, Estados Unidos y Japón.
Sobre la supercomputadora más rápida del mundo, Frontier, le dedicamos en su momento un artículo derivado de las explicaciones de SUSE, ya que como sistema operativo emplea HPE Cray OS, un derivado de SUSE Enterprise Linux. Como tecnología de procesador emplea AMD Epyc para equipar un total de 8.699.904 de núcleos y lograr una puntuación en High-Performance Linpack (HPL) de 1,194 exaflops por segundo.
Fugaku, que ha vuelto a hacerse con la segunda posición y está ubicada en Centro RIKEN para las Ciencias de la Computación de Kobe, Japón, implementa 7.630.848 de núcleos de arquitectura ARM para alcanzar una puntuación con HPL de 442 petaflops por segundo. Como sistema operativo emplea Red Hat Enterprise Linux.
Lumi, la supercomputadora situada en Finlandia, emplea la misma base tecnológica que Frontier, o sea, procesadores AMD Epyc y HPE Cray OS como sistema operativo. Sin embargo, «solo» implementa un total de 2.220.288 de núcleos y la medición de su rendimiento con HPL ha arrojado una puntuación de 309,1 petaflops por segundo.
Leonardo, la máquina ubicada en la Tecnópolis de la ciudad italiana de Bolonia, retiene el cuarto puesto que obtuvo el año pasado y es una de las dos máquinas de las diez primeras que emplean la tecnología de procesadores de Intel, siendo Tianhe-2A, ubicada en China y que ocupa el décimo puesto, la otra supercomputadora que emplea la tecnología Xeon. Leonardo implementa un total de 1.824.768 de núcleos para alcanzar una puntuación de 238,7 petaflops por segundo con HPL.
Cogiendo el total del TOP500, lo que hay es una clara competencia entre China y Estados Unidos. La cantidad de supercomputadoras que el país asiático ha conseguido colocar ha bajado de 162 en 2022 a 134 en 2023, mientras que el estado federal norteamericano ha aumentado su presencia de 126 a 150. Aquí posiblemente haya influido el conflicto político-comercial que mantienen ambos países, y es que Estados Unidos, si ve que puede hacerse con el primer puesto en algo, nunca se conforma con el segundo, más si el rival a batir se ha convertido en una amenaza para sus intereses.
Alemania se hace con el tercer puesto al colocar 36 supercomputadoras seguido de Japón con 33, Francia con 24, Reino Unido con 14 y Canadá con 10. Para sorpresa de algunos, Brasil se ha hecho con octavo puesto con 9 máquinas, mientras que España solo ha logrado colocar una supercomputadora, la MareNostrum, que está ubicada en Barcelona e implementa 153.216 núcleos Intel Xeon para lograr un puntuación de 6,47 petaflops por segundo.
Ethernet sigue siendo la interfaz predilecta para las interconexiones del sistema al ser empleada en 227 supercomputadoras, lo que representa un ligero descenso en comparación con las 233 del año pasado. Infiniband ha pasado de 194 a 200, Omnipath de 36 a 35 y el uso de las interconexiones personalizadas ha subido de manera notable al pasar de 4 a 31, lo que supone multiplicar su presencia casi por ocho.
Fuente y redacción: underc0de.org